Este modelo entró en el mercado 18 meses antes del estallido de
Por otra parte el Juvaquatre tenía un aspecto moderno y estaba dotado de una suspensión de ballestas transversales, detrás e independiente delante, frenos hidráulicos y una suave caja de cambios. Los sedán se dejarían de fabricar en 1950 al no ser más necesarios dada la incorporación del 4CV y del Dauphine. El Juvaquatre fue un modelo importante y todo un éxito de Renault en su recuperación de posguerra, justo cuando la industria del motor francesa más lo necesitaba.
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